Muchas veces hemos oido la palabra empatizar. Es una palabra muy utilizada y muy pocas veces puesta en práctica por desgracia.
La empatía es la capacidad para ponerse en el lugar del otro y saber lo que siente o incluso lo que puede estar pensando.
Realmente las personas que tienen desarrollada esta capacidad son las que mejor leen a los demás.
En el mundo del perro es sin duda, una palabra importante y más importante aún, es el desarrollarla en nuestro día a día con ellos.
Cuando se desarrolla la empatía con los perros ( además de con los humanos) somos capaces de captar una gran y valiosa información a partir de su lenguaje corporal, de su expresión, de sus vocalizaciones (ladridos, gemidos…).
En base a esta información y a nuestra observación podemos saber qué es lo que está pasando por dentro del perro, qué es lo que está sintiendo y decidir si es adecuada nuestra interacción o no.
Cuando mi perrita A está por el parque y empieza a oler moviendose rápidamente sé que ha encontrado un rastro de algo que quizás a mí me desagrade así que, anticipándome a una acción que no deseo, y, unido a buenas maneras la focalizo en mí y la recompenso cuando se me acerca.
Recuerdo también, que algún día que saliamos más tarde al paseo, me venía a buscar y emitia un pequeño gemidito como diciendome....se nos hace tarde… me estoy aguantando.
La traducción del video Entrenamiento con Castigos VS Entrenamiento con Recompensas es un llamamiento a la reflexión sobre la empatía y cómo realmente podría sentirse un perro. Tened en cuenta que una persona pesa bastante más que un perro ( incluso que un perro grande) . Así que vamos a ponernos en sus «zapatos»…uff… que es peor, ellos van descalzos.
Respeto Canino espera que os haya sido útil e interesante!